viernes, 28 de octubre de 2011

Carta Abierta a Juan Carlos Esteban

27/10/2011

Esta carta nace como respuesta a dos notas publicadas por el Sr. Juan Carlos Esteban, en las que descalifica a dos personalidades de jerarquía, como lo son los Sres Héctor Rufinelli, crítico e investigador de literatura y cine y Catedrático de Stanford University y Enrique Estrázulas, escritor, poeta, ensayista, dramaturgo, periodista y diplomático uruguayo.

TESIS ORIENTAL Y EL CUENTO DE LA CINTA PERDIDA O UNA MENTIRA MÁS CON POCA IMAGINACIÓN. Por Juan Carlos ESTEBAN, 17 de octubre de 2011.
ESTRÁZULAS, UN DIPLOMÁTICO ENTRE GOMIAS Y GOTAN. Por Juan Carlos ESTEBAN. 26 de octubre de 2011.

El Sr. Juan Carlos Esteban parece creer que el francesismo de Gardel se defiende difamando a los investigadores que sostienen el origen oriental del cantor, tal vez con la secreta esperanza de intimidar o desanimar a quienes han dedicado toda una vida a mantener su buen nombre y honor en alto.
Pero no es con agravios ni “parasitando en los detalles” como se prueba una teoría.
Si lo que quiere es probar la falsedad de la tesis orientalista, en primer lugar debe invalidar la prueba fundamental de la existencia de dos niños, constituida por la fotografía escolar de Carlitos Gardel.
Hemos probado que esa fotografía fue tomada en Montevideo, en tanto la trayectoria escolar del niño francés transcurrió -como documenta la investigadora Guada Aballe-, íntegramente en Buenos Aires.

¿Acaso el Sr. Esteban no ve que estas dos escuelas son completamente diferentes?

Esa fotografía escolar muestra las enormes diferencias que había entre el modesto edificio de la escuelita de Montevideo (foto superior) donde fue fotografiado Carlitos Gardel cursando su Primer Grado inferior "C"y el imponente edificio escolar donde el niño francés Charles Romuald Gardes cursó su Primer Grado inferior "B" (foto inferior) en Buenos Aires.



Si el Sr. Esteban no está lo suficientemente dotado como para notar esas diferencias, le sugiero cambie de gafas o se compre una lupa.
Esa fotografía escolar constituye además una prueba fundamental de que hubo un niño indocumentado que cursó su 1º Grado Inferior “C” en una escuelita del barrio sur de Montevideo antes de que Berta Gardes llegara al Plata con su hijo francés, en tanto el francés Charles Romuald Gardes cursó algunos años más tarde 1º Grado Inferior “B” en una escuela situada en la calle Talcahuano 678 de Buenos Aires.El día 8 de noviembre de 2007, hace ya casi 4 años, desafié públicamente al Sr. Juan Carlos Esteban, en su calidad de integrante del C.E.G.

http://francesouruguayo.blogspot.com/2008/06/las-maniobras-evasivas-de-juan-carlos.html

"Desafío públicamente al Sr. Juan Carlos Esteban a que presente las PRUEBAS que él o las instituciones que lo respaldan puedan aportar para invalidar el HECHO EVIDENTE E IRREBATIBLE, de que la fotografía escolar de Gardel fue tomada en la escuela Nº 27, del barrio Sur de Montevideo, o bien las PRUEBAS que demuestren que fue tomada en alguna "supuesta" e "hipotética" escuela de Buenos Aires, similar a la de Montevideo, agregando en ese caso, planos de la misma, otras fotografías tomadas en el mismo local y los antecedentes testimoniales que permitan justificar que se la mencione.Este desafío es extensible al C.E.G. (Centro de Estudios Gardelianos)"Todavía no han respondido racionalmente.
Ver:
* CARLOS GARDEL Y SU ESCUELITA MONTEVIDEANA - Absurda refutación de Juan Carlos Esteban
Fantasía irracional y demostración de ignorancia al intentar descalificar la importancia testimonial de un documento fotográficoEs comprensible que el Sr. Esteban no pueda responder al desafío porque de la escuela en la que fue fotografiado Carlitos Gardel, no sólo no tiene matrículas, ni registros, ni certificados, ni historial, ni antecedentes que permitan suponer su existencia, sino que ni siquiera puede ofrecer la imagen de una hipotética escuela alternativa en Buenos Aires.Las informaciones que el Sr. Esteban pone al alcance de sus lectores son demasiado contradictorias.
En su libro “Tango, Vigencia y Crepúsculo”, pág 145, publica la fotografía escolar de Carlitos Gardel afirmando que correspondía a “Primer Grado Inferior “C”, y que fue tomada en
1897.

Sin embargo, los registros existentes de la escuela de Talcahuano y Viamonte, dicen claramente que el niño francés Carlos Gardes cursó ahí Primer Grado Inferior "B".

En el vergonzoso libelo “Carlos Gardel, Controversia y Punto Final”, de autoría compartida con Monique Ruffié y Georges Galopa, página 98 afirma:
d)
El marco izquierdo de la puerta del aula, lleva impreso 1º C, señalando el grado que estaba cursando- práctica habitual de identificación fotográfica, en los colegios argentinos”.Pero inmediatamente después dice:
c)
"La foto corresponde a la escuela de Talcahuano 678, Capital…"
Y todos sabemos ya, que Charles Romuald Gardes cursó en esa escuela Primer Grado inferior “B”, no
Primer Grado Inferior “C”. A pesar de haber afirmado en el libro anterior que la fotografía era de “1897, con 7 años”, en la página 113, el Sr. Esteban, cambia el año por el de 1896, que según interpreta, es la fecha de ingreso al primario. Parece no haber notado que a comienzos de 1896, Charles Gardes sólo tenía 5 años de edad, y parece haber olvidado que figura inscripto en la escuela de Talcahuano en 1897, no en 1896.

En nota titulada "CONTANDO LAS COSTILLAS" , escrita en colaboración con Jack Lupic, responsable de la página, ambos, además de adjudicarme mendazmente todo lo que les molesta se haya dicho de Gardel desde antes de que yo naciera, me acusan de ser la responsable de:
25) "La deliberada ocultación de que la foto escolar fue sacada en 1896, con Carlitos de 6 años, según declara Doña Bertha a la "CANCIÓN MODERNA", en 1936

Conclusión: El Sr. Esteban no consigue ponerse de acuerdo ni consigo mismo.

La incoherencia senil que pone en evidencia con sus dislates, podría justificar o disculpar los agravios vertidos.
Lo que es imperdonable es que dedique su tiempo a obstaculizar la labor de investigadores serios que buscan la dilucidación de la verdadera biografía gardeliana.

¡Deje ya de tratar de distraernos con espejitos de colores, Sr. Esteban!, y dedíquese a alimentar palomas en las plazas…